BELLEZA
CINCO TÓPICOS SOBRE SALUD Y BELLEZA
1.LAVARSE EL PELO TODOS LOS DIAS HACE QUE SE CAIGA.
Falso.
La
gente que obra así lo hace porque produce excesiva grasa en el cuero cabelludo
y necesita de esta higiene para no presentar un aspecto sucio y descuidado.
Además, esta limpieza es buena porque evita la obstrucción del folículo piloso
y el ahogo del mismo, y se puede llevar a cabo gracias a los champús de uso
frecuente, que ya no presentan efectos secundarios indeseables. Eso sí, se
recomienda secar el pelo a conciencia y sin acercar demasiado el secador a las
raíces, en caso de secarlo de esta guisa.
2. LA
PASTA DE DIENTES SE EXTIENDE MEJOR SI SE MOJA ANTES EL CEPILLO. Falso.
Nunca
se debe proceder así, ya que el dentrifico pierde parte de sus efectos al
contacto con el agua. En un cepillado correcto se frotan los dientes en todas
las direcciones, durante dos o tres minutos mínimo, y después se enjuaga.
3.
EL AGUA DE BAÑO MUY CALIENTE ES EFICAZ
PARA DORMIR A PIERNA SUELTA. Verdadero.
Pero
no compensa el daño que causa, ya que relaja los tejidos (contribuyendo a la
flaccidez) e influye negativamente en la circulación sanguínea, y por tanto las
varices. La temperatura debe oscilar de 23 a 26 grados, y una vez finalizado el
baño, es recomendable acabar con una ducha de agua fresca.
4.
DORMIR DE 8 A 9 HORAS DIARIAS ES LO MÁS
SALUDABLE. Falso.
Siete
horas bien aprovechadas son suficientes para alcanzar un rendimiento óptimo del
sueño. Dormir en exceso, no es saludable, y puede indicar alguna dolencia o condiciones
inadecuadas, como excesivo calor, un colchón incómodo o una cena pesada. Si se
ronca, hay que acudir a un especialista, ya que el cerebro no recibe todo el
oxígeno necesario, y el cansancio se acumula aunque se duerman todas las horas.
5.
HACER MUCHO EJERCICIO (¡CUANTO MÁS,
MEJOR!) RESULTA ÓPTIMO. Falso.
Un
exceso de ejercicio eleva el número de radicales libres, por lo que se envejece
más rápidamente. El ejercicio debe practicarse con prudencia, y no de manera
compulsiva. Se recomienda andar a diario, de modo regular y acompasado, durante
40 minutos mínimo, pero sin forzar la maquinaria. O, por ejemplo, practicar un
deporte aeróbico de manera controlada previamente por un especialista, unas dos
veces por semana